Un primer paso a la justicia y legalidad en Tehuacán

Grupo Socorro Romero Sánchez opera con normalidad

 

Fueron varios meses de hostigamiento y persecución ilegales afuera de la empresa Socorro Romero Sánchez y de los domicilios personales de doña Estela Romero Bringas, sus hijos, y hasta sus nietos, cuando estos últimos no tienen nada que ver. Al parecer los vehículos han cesado los intimidantes recorridos.

Tras esas acciones ilegales existe una clara intención de debilitar a la familia Romero Celis para que cedan en el conflicto hereditario que mantienen los Celis contra la diputada Garci-Crepo. No es la primera vez que la política usa su poder político para lograr sus ambiciosos fines. Ha realizado además auditorías ilegales en la empresa; junto con otros delitos de mayor relevancia.

En un principio se trataba de patrullas locales y estatales que circulaban día tras día en actitud sospechosa y; sobre todo, sin motivo justificado, pues la familia no estaba bajo ningún proceso legal. Cuando las patrullas fueron muy sospechosas, y los Celis presentaron las quejas legales correspondientes, aparecieron camionetas civiles que continuaron con la labor.

Fue hasta la semana pasada que el acoso y la vigilancia cesaron. Tal vez el gobierno de Puebla tomó cartas en el asunto, o quizá la diputada Garci-Crespo sí estaba detrás de estos rondines y decidió terminarlos mientras se encuentra amparada legalmente en el proceso de juicio hereditario.

Este descanso para doña Estela Romero Bringas y su familia, puede representar dos cosas: un primer paso hacia la legalidad y una muestra del restablecimiento de la justicia; o bien, la Monina regresará más peligrosa que nunca para reforzar sus persecuciones, como quien para a la mitad de camino para recuperar fuerzas y planear su siguiente estocada ¿A qué motivos obedece esta aparente muestra de justicia? El tiempo lo dirá…